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Retorno a Mercurio | elmundo.es
WASHINGTON.- La sonda de la NASA 'Messenger' se acaba de convertir en la primera nave espacial que realiza una visita de exploración al planeta Mercurio en casi 33 años. Tomará imágenes y datos sobre este caluroso mundo, aunque su inserción en órbita definitiva no se producirá hasta 2011.
A partir de ese día, y tras un sinuoso viaje de más de tres años por el Sistema Solar, 'Messenger' (Mercury Surface, Space Environment, Geochemistry and Ranging, en inglés), comenzará a transmitir imágenes e información con el fin de responder viejos interrogantes sobre Mercurio que también afectan al resto de planetas de su entorno, incluida la Tierra.
Esta será la primera de tres aproximaciones de la sonda al pequeño planeta, durante las cuales llegará a estar a unos 200 kilómetros de su agreste superficie cubierta de cráteres y rocas.
Una vez concluidas esas tres aproximaciones, 'Messenger' entrará en una órbita permanente en torno al planeta más cercano al Sol.
Pero antes de eso, durante las maniobras de aproximación, sus cámaras y avanzados instrumentos recogerán gran cantidad de información, así como más de 1.200 imágenes en primer plano del planeta.
Serán las primeras observaciones directas del misterioso planeta desde que la sonda 'Mariner 10', de la NASA, realizó su tercera y última aproximación a Mercurio, el 16 de marzo de 1975.
Durante esa misión, además, la 'Mariner 10' sólo pudo transmitir información acerca de uno de los hemisferios del planeta.
"Esta es la primera parte de la exploración científica y la expectación aumenta cada día", señaló desde Washington Alan Stern, ejecutivo de la NASA.
"¿Qué verá Messenger?. El lunes lo sabremos", agregó.
Influencia gravitatoria
Según la agencia espacial estadounidense, este primer encuentro del 'Messenger' con Mercurio permitirá a la sonda recibir la crucial influencia gravitatoria que necesita para lograr la inserción en órbita en marzo de 2011 .
Además, recogerá información esencial para continuar el diseño de los planes de su misión, manifestó Stern.
"Durante esta aproximación, comenzaremos a formar imágenes de un hemisferio que nunca ha sido visto desde una nave espacial, y se hará a resoluciones mucho mejores que las del 'Mariner 10' ", indicó Sean Solomon, científico del Instituto Carnegie de Washington y principal investigador de la misión 'Messenger'.
"Las imágenes tendrán varios filtros en colores distintos, de manera que comenzaremos a tener una idea acerca de la composición de su superficie", señaló.
Uno de los puntos de mayor interés para los científicos es la cuenca 'Caloris', un cráter de unos 1.300 kilómetros de diámetro creado por el impacto de un meteorito, según creen los científicos. En su exploración de Mercurio, la sonda proporcionará a los científicos mediciones sobre la composición mineral y química de la superficie del planeta.
También sus instrumentos estudiarán el campo magnético y mejorarán los datos proporcionados por la sonda 'Mariner 10' hace más de 30 años.
Esta última información será clave para comprender la estructura interna del planeta, especialmente el tamaño de su núcleo.
Para llegar a este punto cercano a Mercurio, la sonda -lanzada el 3 de agosto de 2004- habrá recorrido 7.900 millones de kilómetros en una trayectoria que incluirá 15 giros en torno al Sol, una aproximación a la Tierra, dos a Venus y las tres alrededor de Mercurio.
Según indicó la NASA, esa complicada ruta permitirá que la sonda reduzca su vertiginoso desplazamiento al punto de ser capturada por la fuerza gravitatoria de Mercurio y pueda entrar en la órbita del planeta.